El nuevo campus rural para la universidad de Cundinamarca está orientado al desarrollo de los programas de ingeniera agronómica e ingeniería ambiental, entre sus principales espacios se destacan salones de clase, laboratorios y espacios administrativos.
La propuesta arquitectónica busco la mejor adaptación a la topografía y encontró en los módulos estructurales un desarrollo ideal tanto para las necesidades iniciales como para el fácil crecimiento de nuevos espacios académicos. Cada módulo está conformado por 6 espacios que pueden funcionar dependiendo la exigencia. Adicionalmente cada módulo cuenta con zonas de servicios para baños, aseos y cuartos eléctricos.
Los espacios exteriores se proyectaron como un urbanismo interno dentro del campus el cual permite la conexión entre cada uno de los módulos por medio de plazas, senderos, escaleras y/o rampas. Al mismo tiempo en los principales módulos se generaron terrazas y plantas libres que permiten una mayor permeabilidad y conexión con el urbanismo.